La DESatención al cliente de los Telcos y... la Venganza

Pues sí, es paradójico, los que mejor deberían saber comunicarse con sus clientes son los que peor lo hacen... Lo curioso del tema es que estamos inmersos en el lustro del marketing relacional, de las redes sociales y del boca a boca masivo (online, pero boca a boca por no llamarlo tecla a tecla)...

Al final uno se da cuenta que posiblemente a los amigos de Telefónica (mil perdones..., que son ahora Movistar), Orange, Vodafone, ONO, Yoigo y compañía les importan un rábano sus clientes, para ellos desengañémosnos sólo somos números, a ellos sólo les interesa el ARPU (i.e. el beneficio por usuario) y la eterna reducción de sus costes, mientras el cliente, que debería ser el centro de su negocio queda relegado a bien poca cosa.

Los call centres no son para ellos más que eso, un coste, un mal necesario, un engorro y por eso los subcontratan y los envían lo más lejos posible en un perpetuo intento de abaratar. Pero no contentos con eso han inventado las redes inteligentes (más bien deberíamos llamarlas opacas) en las que una fría locución te termina convenciendo de que eres un bobo sin imaginación, ni coordinación, ni capacidad para el deletreo y que lo mejor que puedes hacer es colgar y seguir pagando el servicio del que estabas descontento como un borreguito.

No..., no son los únicos, casi todas las empresas han caído, bancos como el Santander o el BBVA, empresas de servicios como Enagas o Endesa o Iberdrola..., el otro día sin ir más lejos llamé a la Policía para pedir información sobre la necesidad de los bebés de tener pasaporte, un amable agente me indicó que todas las informaciones están en el 060... Sin embargo allí sólo habia una locución que me llevaba por un conjunto de opciones nada interesantes, agotado, frustrado y humillado colgué y pedí cita para hacer un pasaporte, siempre mejor matar moscas a cañonazos.

En fin, espero que nunca les atrape el servicio de telemarketing de Jazztel... una vez entra en el bucle nunca le abandonan, da igual que uno sea amable o un cafre, da igual porque siempre es otro operador, le llaman al menos cinco veces al día (incluso a la hora de la siesta)... al menos uno no se siente sólo en el mundo.

Y esta es... la cruda realidad.

Pero hoy no terminamos así..., os animo a ver este vídeo y a practicarlo siempre que podáis, que la venganza es un plato que se saborea la mar de bien frío, caliente o templado, y esa también es una cruda realidad.